Es en ella donde aprendemos inicialmente a resolver los problemas de nuestro cotidiano vivir, a desarrollar nuestras convicciones, emociones y conductas, o dicho de otra manera,el eje primordial o básico de nuestro carácter, o ética, o modo de ser. Aprendimos a percibirnos a nosotros mismos como seres en relación con nuestros lazos con otras personas y a interpretar los diversos elementos que constituyen el medio cultural y social al que pertenecemos: el respeto, la responsabilidad, la disciplina, la perseverancia, la solidaridad, la justicia, la honradez, la tolerancia, etc.; se aprenden de la madre, del padre, de los abuelos, en el seno del hogar, de la familia, que como se sabe es el núcleo de la sociedad y por el cual debemos esforzarnos en virtud de preservar la razón de la vida.
A la familia no se la elige, deseemoslo se la acepta o no, se la adopta o no. La familia trasciende, y por tanto no muere, pues quienes vivimos en su seno, vamos recreando los valores (o antivalores, prejuicios, etc. ) que espontáneamente, por estar encarnados en ella, nos transmite. Valores, no sólo costumbres; escala de valores, preferencia y jerarquía: una columna vertebral, como los principios y los sentimientos... Sus enseñanzas marcan, influyen enormemente, y sentimos hacer lo que los seres más queridos, casi como si se expresaran a través nuestro, recordando palabras y gestos; si bien no siempre nos apegamos a ellas, ni concordamos con sus ideales.
No todos se desarrollaron en familia, o en familia sana, en la que reina el amor como verdadera adhesión a lo más auténtico del otro como otro. La Familia se daña productos de prejuicios que confunden, miedos que culpan, indiferencia que lastima, abusos que oprimen, sobreprotección que anula ...
Aun habiendo sufrido la desgracia cruel de la peor familia, se puede rescatar la gratitud por ser, por haber sido causado y gestado, por regalarnos el don de existir.
La auténtica familia, el ideal, es escuela del amor, es puente entre lo humano y lo divino, siendo mediador básico para el desarrollo ético, es decir para motivar y orientar eficazmente la capacidad de encarnar los valores que perfeccionen al hombre como hombre. Las virtudes, actitudes estables hacia lo noble, tienen en la familia, rostro cercano del Amor, la fuente más segura.
Te invitamos a dar tu opinion... Victoria Cornejo, Krystle Maturana, Rebeca Rodriguez
encontre este blog mientras buscaba sobre la familia, y me parece que igual tienen razon, sea como sean nuestras familias igual influyen en nosotros.
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